El Hombre que pasea las carnes

Conoce más sobre el lugar donde se detiene el tiempo

A Fraga, como su propio nombre indica, está ubicada en un bosque de árboles de hoja caduca que dan cobijo a un pequeño conjunto de casas. Este lugar, ubicado en el municipio costero de Moaña, no podría entenderse sin mencionar el Río de la Fraga. Desde el monte Xaxán, donde nace a más de 600 metros de altura, el río desciende hasta llegar al núcleo urbano, no sin antes detenerse en este pequeño gran lugar.

Inmerso en un bosque de ribeira, fauna y flora compiten por el papel protagonista: jabalís, conejos, zorros, robles y pinos comparten este entorno. A lo largo de su recorrido, la orografía del paisaje va cambiando, pero sin duda, hay que mencionar los saltos de agua o fervenzas cercanos a su nacimiento y la ruta de los casi 30 molinos de agua que empleaban las familias de A Fraga para regar sus campos y moler el maíz.

Conocido por muchos como O Río dos Ladróns, no sólo ofrece naturaleza a quien quiera descubrirlo, sino también una pizca de historia. Cuenta la leyenda que hace muchos, muchos años, los vikingos asaltaban los barcos que navegaban la ría de Vigo y escondían sus tesoros en la parte alta del río. Por tanto, no es de extrañar, que este lugar sea considerado una joya a tan solo quince minutos de una ciudad como Vigo.

Es cierto que en la actualidad ya no se habla de ladrones ni vikingos, pero sí existen rumores de que últimamente hay un gran loco que sale a pasear con las carnes del restaurante Taberna A de Lino. El Hombre que pasea las carnes es conocedor de todas las riquezas de este río y de cómo estos paseos pueden “temperar” el producto y convertir sus carnes en las más felices. No sabemos hasta qué punto es fantasía o realidad, pero te invitamos a descubrirlo.

Te estaremos esperando en este pequeño gran lugar llamado A Fraga.